domingo, 23 de febrero de 2014

CAPÍTULO 45


*Narra Michelle*

Ya estábamos a miércoles, justamente en el ecuador de la semana. No sé por qué a las personas les gusta el miércoles, para mí se quedaba muy lejos del viernes. Aparte de que hoy he tenido un par de exámenes que aprobar.
Sophie y Sheila me contaron su nuevo plan, y como yo no quería ser de menos, también iría a hablar con Harry. En verdad, no se les da nada bien mentir y yo no intuyo demasiado mal. Cada vez me parecía más a mi madre. Sophie nls dijo que Harry estaría libre hoy y hemos acordado en tomar algo en alguna parte. Estaba muy claro que al Starbucks no podíamos ir, ya que trabajaba allí, así que iríamos a una cafetería cercana.
Terminé mis deberes y me cambié de ropa porque no pensaba presentarme en chándal.
Me despedí de mis padres y de mis hermanos y salí de casa en dirección a la cafetería, según las indicaciones que me prestaron.
Creo que soy la primera en llegar. Saludé a un camarero que pasaba por allí y pedí una mesa alejada, en el fondo. Por suerte, no había mucha gente. Después entró Sophie y, más tarde, Sheila. Como suponía Harry fue el último en llegar. Ya estábamos los cuatro.
Nos sentamos cada uno a un lado de la mesa y nos sirvieron nuestros cafés. Cuando tomaba café me revolucionaba, así como dato.
-Michelle, no te eches tanto azúcar.
-No pasa absolutamente nada.
-Bueno, chicas, ¿queréis decirme ya lo que pasa?-preguntó Harry, que no paraba que toquetear el móvil.
-Verás, lo que ocurre es que Alex se...
-¡Eh! Lo cuento yo, que fui yo la que ideó el plan, aver si te acuerdas-protestó Sophie.
-Pero tú no te explicas bien.
-¿Y si lo cuento yo que soy muy chistosa y así Harry no le afecta tanto la noticia?
-¡No!-me gritaron las dos al unísono.
-Me voy y cuando lo hayáis decidido me avisáis.
-No. Sheila, dilo tú.
-Mejor dilo tú, perdón.
Les dediqué una mirada amenazante para que una de las dos comenzase de una vez si no les apetecía que Harry se marchase y nos quedásemos las tres solas sentadas como unas bobas.
Finalmente, Sheila aclaró la voz y hablo:
-Lo que ocurre es que Sheila nos reunió el otro día a todas y nos confesó que dentro de unas semanas se mudaba con su padre a Cambridge, pero nosotras no queremos que se vaya y hemos intentado impedirlo.
Minutos después, Sophie continuó:
-Fuimos a convencer a su padre de que no podía hacer eso, pero él no nos escuchó y hemos pensado que tú... podrías ser capaz de solucionar las cosas. ¿Tú que crees?

*Narra Harry*

¿Que qué creo? Simplemente no me lo creía. No puede irse, no ahora. En estos momentos nuestra relación marchaba bien, aunque teníamos qur comentar algunas cosillas muy significativas.
Me sentía un poco destrozado. ¿Era yo la razón por la que se iba? Pues me siento culpable también, y los adjetivos van aumentando por segundos. ¿Por qué no me había contado ella todavía personalmente?
-¿Y qué tengo que hacer?
-No lo sabemos.
-¿Cómo que no lo sabéis?
-Eso lo dejamos en tus manos. Aunque te ayudaremos.
Resoplé. Qué tarea más complicada. ¿Cómo iba a evitar que la chica a la que quería no se alejase de mí sin que ella se de cuenta? Si ella se movía a otra cuidad, la verdad casi nada cambiaría; ya que haría todo lo posible para verla, pero ya las cosad no serían lo mismo. Y tampoco podía permitir perderla de nuevo.
-Si es necesario pedimos consejo a ese tal Will y asunto zanjado.
-No-siempre que mencionaba ese nombre me ponía de los nervios y recordaba esa imagen tan... asquerosa. Así que proseguí:
-Tendré que taladrarme la cabeza para ingeniar algo.
-¡Bien!-las tres me abrazaron de lado.
-¿Estáis seguras de que yo sirvo aquí?
-Pues claro. Eres el único.
-¿Por?
-Vamos Harry. No tr comportes como si vivieses en otro mundo-comentó Michelle guiándome un ojos a la vez que hacía movimientos con las manos como si fuese evidente.
-¿Se me nota mucho?
-Solo un poquito.
-Mmm, demasiado-admitió Sheila.
-La especialidad de Alex es fingir como si nada sucediese, pero haznos caso cuando te decimos que ella también siente algo por ti, aunque no sea consciente.
-Yo no estaría tan convencido.
-Tú el que menos-contestó Sheila en tono sarcástico. Los dos estábamos de acuerdo en que era mentira.
-Bueno, vamos a terminar con nuestros cafés que se van a enfriar.
-Está bien.
Los cuatro continuamos con nuestros respectivos cafés. Ninguno volvió a comentar nada, salvo por alguna broma, pero hoy no era un día de muchas palabras.
-¿Y Emily? Se me hace extraño no verla con vosotras.
Las chicas me miraron fijamente y luego bajaron la cabeza a la mesa. ¿Qué me había perdido?
-¿No te has enterado?
-¿Qué ha pasado?
Esta vez, las tres se miraron entré sí inseguras.
Comenzaron a relatarme la historia. ¡La de cosas que puedes saber en dos horas!
-Zayn es incapaz de hacer eso. Yo mismo lo presencié: no pasó nada. No os preocupéis.
-¿Pero tú no estaría decepcionado de ti mismo? Ahora Emily está muy afligida y no es consciente de lo que dice o de cómo se comporta.
-Entonces hay que encargarse de esto también.
-No, mejor que lo arregle Zayn, dejadle a él-sugerí. Conozco muy bien a Zayn y sé que hará lo que crea conveniente para recuperarla.
>Me tengo que ir, chicas. Me ha encantado estar con vosotras. Ya veré lo que puedo remediar.
Me despedí de las chicas formando un abrazo grupal y me marché de la cafetería.
Seguro que tenía que haber alguna manera para no separarme de Alex.

*Narra Emily*

Acababa de llegar de trabajar. Hoy no he articulado palabra con Alexia. Nos hemos saludado como buenas amigas que somos pero a partir de ahí no hubo otro tema de conversación. Las dos estábamos realmente derrumbadas. Ella estuvo limpiando mesas y yo atendiendo clientes. Tan apenada estaba que las personas habituales que entraban en el Starbucks me preguntaban que qué ocurría. Y yo voy y no les respondo. Aunque se lo agradezco mucho, porque yo creía que solamente mis amigas y mi familia les importaba y en parte, los chicos, pero ya estaba más reformada.
He ido al instituto, a trabajar y excepto esas cosas me he pasado el día en casa. Necesitaba poner en orden mis pensamientos.
Mi madre nos llamó para cenar y yo acepté. No quería preocupar a mis padres, aparte de que ellos no sabían nada del tema y tampoco tenían por qué enterarse de que salgo con un famoso. Para ser más exactos, me había tomado un tiempo con un famoso. Sonaba algo espeluznante. Aunque pasar básicamente un par de días encerrada en casa y deambulando hasta por los rincones de todas las habitaciones había servido. Ya me encontraba completamente bien. Un poco decaída, pero bien.
Hablando de Zayn, no ha parado de mandarme mensaje y sms. Parece desesperado. No le voy a responder, no me da pena. Miento, sí me da pena. Y no lo hago por orgullo, si él considera que está dolido se tendría que imaginar lo que me sucedió a mí hace unos días, cuando vi algo que era preferible no ver.
-Hija, come un poco. Estás muy rara.
-Mamá, ya te he dicho que ya estoy mucho mejor.
Mi madre me cogió de la mano y me observó conmovida. Era mi madre y me mataba verla así, aunque no podía contarle nada, ya que la que mataría aquí sería ella a mí.
-Ya sabes que si tiene algún problema puedes contar conmigo.
-Gracias, mamá. Lo haré-tanto ella como yo había sospechado que no decía la verdad. Lo dejó pasar y continuamos con la comida.
Creo que mi madre me había dado ánimo para seguir adelante y dejar mis absurdas preocupaciones a un segundo plano. No voy a comenter estupideces por Zayn.
Al terminar subí de nuevo hacia mi dormitorio y mi móvil estaba parpadeando, lo que me indicaba que tenía un mensaje y ya me intuía quién podría ser. Había puesto el móvil en silencio porque quería permanecer aislada durante un tiempo, pero no dio resultado. Desbloqueé el aparato y lei detenidamente el mensaje de Zayn recién enviado.
Oh, Dios mío. No es cierto. Iba a venir, a Londres. Eso yo no lo podía permitir, no estaba preparada para hablar con él, ni mirarle a la cara. Simplemente, este hombre va a hacer lo que esté en sus manos para que volviésemos. Si quiere guerra, la va a tener, aunque le siga queriendo desde lo más profundo de mi corazón.



¡Bueeeeeeeeeeeeenas!
Parece que en el próximo cap se avecina pelea, ¿qué pasará? Misterio.
¿Cómo estáis? Espero que muy bien y también espero que os haya gustado este capítulo nuevo. Perdón si hay alguna falta de ortografía, no tengo tiempo para corregir. Yo, la verdad, estoy algo agotada porque aunque no lo parezca tengo que estudiar y un montón de cosas por hacer. Que sepáis que yo los capítulos los escribo en clase y hay veces que me llaman la atención xd.
Bueno, como siempre, intentaré subir de nuevo la próxima semana.
Mi ordenador sigue igual de mal, crucemos los dedos para que se arregle cuanto antes.
Muchímaaaaaaas graaaaaaaaacias a las personas que siguen leyendo mi fic y a las que comentan, aunque no pueda leerlos.
Un besazo a todos, ¡nos vemos!<3

1 comentario:

  1. Como siempre Genial, me encanta tu novela, esta genial. Haber si Zayn y Emily arreglan ya las cosas jajaja. 《Y yo a veces también los escribo en clase》 jajaja Un beeeso

    ResponderEliminar