CAPÍTULO 29

*Narra Louis*

 

Es raro que hoy, sábado, no tengamos ninguna entrevista, ni sesión de fotos ni nada. Y este día libre lo aprovechamos los cinco en el apartamento de Liam viendo una maratón de pelis desde las nueve y media de la mañana, y ya eran las dos del mediodía.

De repente empieza a sonar un sonidillo extraño.

-¡Es mi móvil! Ya voy yo.-Liam se levantó y se dirigió a la mesilla donde se encontraba el móvil.

-Anda Liam, cambia el tono que me daba miedo.-Comenté abrazándome a Harry. Él lo ignoró.

-¿Si? Ah, ¡hola Sophie! Muy bien, ¿y tú? Sí, si estoy con ellos en el apartamento. ¡Claro! ¿A qué hora sería? Perfecto. Vale, un beso, hasta luego.

Recapitulemos: Sophie, hablando con Liam. ¿Por qué hablaba con él? ¿Por qué no conmigo? Si casi siempre me llamaba a mí… bueno, que yo sepa. Según he escuchado, parece ser que la conversación iba a quedar. ¿Los dos? ¿Solos? No, no, no, no y mil veces más, no.

-¿Quién era?-Pregunté.

-Como si no te hubieses enterado.-Los demás rieron.

-Era Sophie. ¿La conoces verdad? Chica pelirroja, guapa, ojos celestes de la que Louis tiene una especia de flechazo…-Respondió Liam.

-Me suena, me suena… ¿Y por qué te llama a ti?

-Si tú quieres la próxima vez te la paso para que converséis un ratito.

-Estaría bien, así tendré esa oportunidad ya que ella no me va a volver a llamar.

-Que tonto estás. Ha llamado porque a las chicas y a ella les apetecía quedar con los cinco.-Remarcó la palabra “cinco”.- Por la tarde, yo le he dicho que estupendo.

-Ay mi Lou se pone celosín, además, nosotros nunca nos peleamos por una chica.-Harry me cogió de los carrillos.

-Y Liam tiene novia.-Finalizó Zayn.

 

*Narra Sophie*

 

Como hoy es sábado, y no, hoy no toca instituto, hemos pensado en quedar con los chicos, si les viene bien.

Minutos después de decidir sobre hora y lugar llamo a Liam para saber si contábamos con ellos, y no me equivocaba, decía que no tenían nada que hacer y que aceptaban encantados.

Y en este momento os preguntaréis: ¿Cuál es la razón de lo que no llame a Louis, si es con el que más… relación tengo? Sabéis la respuesta. No me apetecía hablar con él después de lo que pasó el otro día entre nosotros. Que eso ya estaba superado, pero que no me atrevía todavía.

Lo que pasa es que me gusta muchísimo y hay algo que me echa para atrás cada vez que le tengo demasiado cerca.

Bueno, dejemos ese asunto, vamos a quedar todos juntos y no voy a preocupar a nadie por mis problemas, que no sé si se podría llamar así, sobre todo las chicas.

 

*Narra Alexia*

 

Era la hora de comer y no me encontraba ni para un vaso de agua, con solo el hecho de pensar que volveré a ver a Harry me pone los pelos de punta. Se supone que estaba solucionado, pero salir con él es un caso distinto.

Simplemente poned un ejemplo, imaginaos cuando estemos uno delante del otro al saludarnos. ¿Le doy dos besos? ¿Un abrazo? ¿Qué tal un apretón de manos? Está claro que tirarme a él y soltarle un gran morreo no iba a ocurrir.

Aunque eso ya se sabrá dentro de unas horas. Por ahora tengo que ir pensando en los sitios en los que podemos quedar los diez.

Con el consentimiento de mi madre tuve que probar un poco de la comida, siempre me regaña porque últimamente no como bastante. Y yo sé quién es el causante, tanto pensar me acaba dejando sin apetito.

De los nervios me duché y comencé a vestirme. Estuve preparada cincuenta minutos antes de lo previsto, así que limpió un poco la casa, ya que era nuestro punto de encuentro.

 

*Narra Michelle*

 

Aquí estoy, rayándome la cabeza de si llevar puesto una camisa de manga larga o jersey fino. Es la primera vez que me sucedía esto, yo soy más de elegir entre nesquik o cola cao.

Finalmente de percaté por el jersey.

Cogí lo necesario y lo metí en mi bolsito. Me despedí de mi familia y comencé a caminar hasta casa de Alex.

Al llegar llamé a la puerta y vi que era la segunda. ¡Bien! Sheila y Alex se encontraban hablando en el salón con la madre de esta.

Al rato apareció Sophie y más tarde Emily. Seguramente los chicos andarían perdidos, ya que nunca han ido a casa de Alexia y la indicación que les dimos no les ayudará.

Tardaron menos de lo que yo pensaba, Alex abrió la puerta y por petición mía nos dimos un abrazo grupal, más adelante alguna me lo agradecerá, el resto puede que no, quien no quiere un beso de su novio.

Presiento que será una tarde-noche interesante.

-¿Cómo está Luke?

-Bien.

-Me alegro.-Me limité a sonreírle y nos dirigimos todos al salón.

 

*Narra Sophie*

 

Menos mal que Louis no se sentó a mi lado. Hay dos sofás y un sillón y las parejitas estaba una encima del otro, Alexia en el sillón y en unos de los sofás yo, Zayn y Emily terminado en Harry. Enfrente Niall, Liam y Sheila y Michelle. Así que lo no tuvo más remedio que sentarse sobre el apoyabrazos.

Empezamos a contarnos como hemos estado estas semanas sin vernos: nosotras de los estudios, ellos de su carrera, Liam y Sheila nos contaron la cena en familia, Zayn y Emily, de su mini-discusión; Niall de poner celoso a mi primo junto con Michelle, esta se sonrojó un poco e intentamos sonsacar algo de Harry y Alexia, pero nada, que todo arreglado.

Terminada la charla, que nos duró una hora o más, salimos a dar una vuelta y después pensar dónde deberíamos ir.

 

*Narra Alexia*

 

Fuimos por Picadilly Circus, y sin que las fans pudieran descubrirles, los chicos llevaban capuchas y gafas de sol. Siempre hay alguna que se da cuenta, pero a ellos no les molesta nada en absoluto.

Estábamos en dos grupos: Michelle, Liam, Harry y Emily por una parte y Sheila, Zayn, Sophie, Niall y yo justo detrás. Hey, falta alguien, miré por todos lados y le vi. Me acerqué a él.

-¿Por qué te apartas de nosotros?

-No tiene importancia.

-Venga Louis, a mi no me engañas, yo te conozco.-Se puso cabizbajo. Luego alzó la cabeza.

-Está contenta. Primero con Liam y ahora con Niall, me encantaría que estuviera de esa manera conmigo.

-¿Y por qué no se lo dices?

-Parece ser que no siente lo mismo por mí.

-Tonterías, eso es que cree que siente algo por Mike y no es cierto. Te apuesto lo que sea a que si lo confiesas de una vez cambiará de opinión instantáneamente.

-¿Estás tan segura de que saldrá bien?

-Soy su amiga, no de toda la vida, sé que en ocasiones lo pasa mal y se lo calla, saca una sonrisa y como si no ocurriese nada. Pienso que contigo conseguirá ser feliz. Y que si le gustas, diga lo que diga.

-Muchas gracias Alex.

-De nada. Vamos, que nos quedamos parados.

 

-Tú también deberías de resolver ese asunto.

-Touché.

-¡Chicos entramos ahí!-Exclamó Sheila.

-No hace falta que lo grites, y sí.

 

*Narra Sophie*

 

En Hard Rock había bastante gente. Logramos  una mesa grande y alejada.

Me temo que la suerte no dura un día entero, Louis se colocó delante de mí. “Sophie, no vas a morir por esto, has venido a cenar con tus amigos”, me convencí a mí misma.

Pedimos platos entrantes,  para compartir y bebidas.

…

Bueno, hay que admitir que la cena ha estado fenomenal, si es que con estos chicos es imposible aburrirte, nosotras tampoco es que seamos muy normales. Y ningún problema con Louis, salvo cuando le observaba con disimulo y al verme casi se me cae la bebida.

-Sophie, ¿podemos hablar en privado, por favor?-Genial, además lo pregunta en voz alta para que yo no me niegue.

-Vale.-Se levantó y yo le imité.

Salimos a la calle. Esto se complicaba. Te lo suplico suerte, vuelve.

 

 

 

Holaaaaaaaaaaaaaa holitaaaaaaaaaaaa :) Ya he subido un nuevo capítulo, espero que os haya gustado. Sé que no es gran cosa, pero ya os digo que en el próximo ya tengo la idea de lo que pasará, no hace falta que ya estéis intrigadas.

Intentaré subir lo antes posible, me estoy planteando en escribir más ratos para así tener capítulos hechos, lo hice al comenzar la fic, pero se me acabaron las ideas y al final cada día tenía que currarme un cap.

No me alargo. Solo que... ¡he conseguido entradas para WWAT! Espero que los que leáis esto también lo hayáis conseguido.

Muchas gracias por leer:3 Un besote!

PD: he pensado en cambiar el tipo de letra en toda la nove por esta. (Tampoco es que importe mucho).

 

 

 

CAPÍTULO 28

*Narra Sheila*

 

Bueno, ya era viernes. Esta semana había sido demasiado lenta, sobre todo el tener novio y no verlo en estos últimos días, pero mañana llegaría ese día, el día en el que se decidiría si seguiría con Liam o no.

Explico: mis padres se han sacado, con mucho esfuerzo, un fin de semana libre para dar el visto bueno a Liam. Creo que desde que les comenté ese tema están de los nervios. Hasta que no lo conozcan no pararán de darle vueltas y vueltas al asunto.

Solo falta la prensa, parece que ya soy famosa o algo parecido. Salgo en casi todas las revistas que suelo leer. Es muy raro verte en fotos cuando siempre se encuentran algunos se mis ídolos.

Ah y Liam y también confirmó nuestra relación, como negar el beso en público.

-¡Tim, me voy a comprar!-Comida, debe de ser que mi hermano se sube comida a su habitación y come mientras juega con la Xbox.

Salí de casa y decidí ir caminando aunque el supermercado me pillaba algo lejos.

Mientras pensaba en las cosas que tenía que comprar porque parecía que mi hermano era igual a Michelle. Sigo sin entender el por qué de zamparse lo primero que ves, yo me pondría gorda al segundo, y eso que en esta etapa de adolescentes es importante nuestro físico. Puede que esté exagerando un poco.

A lo que voy, salgo, pongo música con mis auriculares sobre mis orejas y ahí todo tipo de gente: alguna pasaba de mí, otros me miraban de la cabeza a los pies y otras me fulminaban con ella. Pero me llamó la atención un grupo de chicas, de una diferencia de unos tres años por debajo de mí, cuchicheaban y no paraban de observarme hasta que las correspondí y gritaron entre ellas y dieron saltitos. Se acercaban, esto va a mejor por momentos.

-¡Hola! Una pregunta, ¿tú eres la novia de Liam Payne?

-Emm, sí.-Les saqué mi más reluciente sonrisa posible y ellas volvieron a gritar.

-Perdón por la emoción, es que nos alegramos de conocerte.-Dijo otra chica.

-¡Sí! Somos directioners.  Nos alegra que estés con Liam y que hagáis tan buena pareja, y eso que solo te hemos visto en revistas o redes sociales, no vamos a insultarte ni nada por el estilo.-Continuó otra distinta.

-¡Además eres muy guapa!-Soltó la primera.

-Oh, ¡gracias! Yo también soy directioner.-No puede evitar saltar con ellas. Sí analizáis las cosas bien, soy la novia de uno de mis ídolos.-Y bueno, gracias por vuestro apoyo.

-De nada. Tienes mucho morro…-Respondió la cuarta chica. A todas les cambió la cara.

-Supongo que gracias. ¿Queréis que le diga algo de vuestra parte a Liam? No he quedado con él desde hace unos días aunque seguro que si le llamo…

-¡SÍ! ¡SÍ, POR FAVOR!-Exclamaron a la vez.-Dile que es una gran persona y que se merece cada trozo de fama él y los chicos, que gracias por hacer feliz a millones de fans, que esperamos hablar con él algún día porque está claro que será el mejor de mi vida y que le queremos mucho.-Concluyó la segunda chica algo nerviosa y emocionada.

-Creo que conseguiré aprendérmelo. Si me disculpáis tengo que ir a comprar.

-Claro ya no te entretenemos más. Adiós Sheila.-Wow, me sorprende que sepan mi nombre.-¡Adiós!-Se despidieron las demás y me fui, no sin antes sacarme una foto con ellas, son muy insistentes y eso que al principio me negué.

Seguí andando por las calles y tras unos minutos llegué al supermercado. Cogí todo lo necesario para sobrevivir por lo menos una semana en un carro. Recorrí la sección de lácteos, donde había unas barras de chocolate riquísimas de las que me puedo permitir en ocasiones. Qué suerte, de la marca que me gustaba quedaba una en el estante. Me aceleré para cogerlo, pero una mano se interpuso entre nosotros.

-Esto es mío.-Replicó una chica de aproximadamente mi edad que cambió su expresión al verme detenidamente.

-Kate, mira a quién tenemos aquí.-Apareció otra chica y se unió a su amiga. Esto no iba a acabar bien, quería irme.

-Quedaos con el chocolate.-Me marché de ahí hacia la caja.

-Tienes razón, ya bastantes con tu novio encima nos robabas la última barra de chocolate. Demasiada suerte que tienes tú niña.-Gritó la tal Kate, cosa que era imposible que no lo escuchase.

Ahora si que fui a la caja rápidamente y pagué al cajero.

Está muy claro que hay gente que no respeta a las demás y que les encanta molestarles. Aunque yo esto ya me lo esperaba, lo he visto muchas veces y lo único que se tiene que hacer es pasar del tema, puede que duela o sea difícil de superar, pero es lo mejor.

También era completamente estúpida porque tengo que llevar a cuestas un par de bolsas al volver caminando y había gastado el suficiente dinero como para pedir un taxi o coger el autobús.

*Narra Liam*

 

Ya iba diez minutos tarde, qué van a pensar sus padres sobre mi impuntualidad. Me estoy preocupando más de lo normal, ¿verdad? Creo que nunca me había sucedido esto y esa es la razón de que saco me lado irritable.

Llegué por fin a su casa y toqué al timbre. Espero que abra ella, así fue, tan guapa como siempre. Me dio un tierno beso y me susurró “tranquilo” al oído, puede que a la larga hiciera efecto.

-Mis padres todavía no han venido, así que siéntate.-Me puse cómodo en el sofá mientras observaba el salón, estaba más limpio y ordenado que lo habitual.

Seguidamente apareció Tim sonriéndome. Mmm, eso debe ser una buena señal. Estuvimos hablando de sus padres o de cómo se ocupaban ellos solos en la casa cuando ellos trabajaban. Hasta que llegó ese momento que me temía.

-Ya voy yo.-Dijo Tim. Se levanté y abrió la puerta.

-¡Timmy, hijo mío!-Noté como exclamaba una mujer básicamente espachurrando a Tim.

-Mamá, ¿qué te he contado sobre tú ya sabes?

-Tim no soporta que le llamen Timmy, piensa que ya es mayor para llamarle así, por eso yo no lo hago pero mis padres están acostumbrados.-Masculló Sheila. Me cogió delicadamente de la mano y fue a presentarme a sus padres.

Su madre esbozó una gran sonrisa y su padre una algo forzada.

-Y tú eres Liam, ¿me equivoco?-Se acercó a mí y me estrechó mi mano libre.

-No señor Wilson. Un placer.

-Hola Liam, encantada de conocerte.

-Igualmente señora Wilson.-Ella se abalanzó sobre mí y me abrazó.

-Es que estoy muy contenta de que mi hijita tenga un novio formal, bueno, ha tenido un par lo que pasa es que ha durado muy poco. Además, ninguno me gustaba para ella y tampoco eran…-Sheila carraspeó.-Mamá, yo también me alegro de verte y sí, existo.

-No me contestes de esa forma que no me he olvidado de ti.-Ahora le abrazó a ella.

-Se hecho tarde. ¿Por qué no cenamos?-Propuso Tim.

-De acuerdo, quiero ver que tal cocináis.-Todos nos dirigimos al comedor, excepto los dos hermanos.

-Sheila, ¿quieres que os ayude?

-Venga Liam, eres el invitado y mereces sentarte y esperar a que te traigan la comida.-Gritó su madre desde el comedor.

-Ya has oído.-No tuve más remedio que obedecer. Si al final me tendré que quedar a solas con sus padres.

-¿Con que famoso eh? No quiero que mi hija tenga problemas con la prensa y digan cosas sobre ella que no son verdad.

-No tiene que preocuparse señor Wilson, yo me encargaré de ese asunto.

-¿Y cuanto tiempo lleváis saliendo?

-Menos de una semana. Y no hemos hecho nada inapropiado.-Eso sobraba.

-¡Ya está la comida!-Tim puso la mesa a la vez que Sheila traía una ensalada y repartía el pollo asado a cada uno.

-Liam, he tenido en cuenta lo de las cucharas.-Me dijo Sheila al sentarse a mi lado, quedando yo delante de Tim, a mi otro lado su padre y enfrente de él su madre.

 

 

Menos mal, no sé cómo reaccionarían sus padres al enterarse de que tengo fobia a las cucharas.

Empezaron a hablar sobre que sus padres han viajado a Madrid para una presentación del trabajo, qué tal les fue, si hicieron fotos y como era Madrid en sí. Después pasarían al interrogatorio.

-Estoy llena, sigo sin creerme que vosotros hayáis cocinado tan bien. Seguro que Liam tiene algo que ver.

-Le aseguro que no tenía ni idea de esto.

Bueno, yo ha acabado la cena, eso significa que yo ya me voy. ¿Y el interrogatorio?

-Así que mamá y papá, ¿puedo salir con Liam bajo vuestro consentimiento? ¿Por favor?

-Sheila, tú sabes que lo que sea famoso complica las cosas, pero Liam se sabe comportar, es muy educado con nosotros y un chico agradable con quien estar, si me promete que te cuidará y nunca dejará que te ocurra nada…

-Que sí Liam. ¡Bienvenido a la familia!-Finalizó su madre. Al oír eso me alegré y montón y tuve que abrazar a sus padres. Sheila y yo nos besamos.

-Muchas gracias señor y señora Wilson.-Era la primera vez que el padre me sonreía.

-A mi desde ahora Caitlyn, no más señora Wilson.

Me despedí de la familia y me marché a mi apartamento. No había nada que hacer. En el fondo, no había sido para tanto.

 

 

 

 

Vas happeeeeeeeeeenin'? Lo primero: perdón, perdón, perdón y mil disculpas por haber tardado en subir. He estado ocupada y no sacaba tiempo para escribir, la mitad lo he hecho en las clases jajaja.

Lo segundo, ¿os ha gustado? Jajaja ya sabéis que podéis comentar.

Intentaré subir cuanto antes, os lo prometo. Muchaaaaaaaas gracias por leer :)

Un besazo<3

 

 

CAPÍTULO 27

*Narra Alexia*

 

Qué bonito, no lo cogía. ¿Tan mal estaba? Volví a llamar algo impaciente y bajé la pantalla del portátil, así no cotillearían.

-Hola Alexia.-Esa no es la voz de Harry. Y estaba… ¿comiendo?

-¿Niall?-Me levanté de la cama y comencé a andar por la casa.

-Sí, qué pasa.

-¡Hola Alex!-Qué jaleo había allí.

-Emm, hola Louis. ¿Dónde está Harry?

-Encerrado en su cuarto, hemos venido para animarle pero no le da la gana salir.-Ais, pobrecillo. Ahora quien hablaba era Zayn y ya veo como le animan, están montando una fiesta en el apartamento.

 -¿Puede ponerse por favor?

-No creo. Lleva toda la tarde ahí haciendo no sé cuantas cosas.

-Anda Liam…-Supliqué.-Dile que soy yo. Y no os vayáis pasando el móvil que me hago un lío…

-De acuerdo, lo voy a intentar.-Despegó el móvil de su oreja  y lo único que pude escuchar fue pasos.

-¡Harry, tienes una llamada!

-¡No quiero hablar! ¡Déjame en paz, no sé qué hacéis aquí!

-Es Alex, seguro que es importante.-Oí como una puerta se abría y se cerró de un portazo. Solo se oían suspiros al otro lado del teléfono.

-¿Harry?

-Hola. Dime.-Hasta su forma de hablar me entraban escalofríos.

Me senté en el suelo, que fue donde me paré, estaba fresquito.

-Mmm… quiero… quiero disculparme por lo que te… grité en el Starbucks. No pretendía dejarte así. Verás, desde hace unas horas la cabeza me da vueltas seguidamente y estoy bastante confusa. No paro de pensar y pensar y tengo distintas sensaciones que me recorren de arriba abajo. Es que es difícil enterarte de que tu ídolo está interesado por ti cuando él conseguiría a millones de chicas más y finalmente, se olvidaría de ti o de lo que sucedió entre ellos. Entonces llega el punto en el que no sabemos cómo actuar.-Respiré hondo al explicárselo todo de golpe.

-Ten claro que yo siempre te recordaría. Yo no me encuentro mal porque no quieras quedar conmigo, sino porque te gusta…

-No me gusta. Sí. No. No, no sé… Es evidente que en un día no voy a sentir nada por él.

-¿En ese caso no?

-No tengo ni idea.

-Gracias. Ya estoy mucho mejor. Tranquila, esperaré hasta que soluciones eso que ronda por tu cabeza.-Reí.

-Gracias a ti, gracias por perdonarme. Tenía remordimiento.

-No te preocupes. ¿Todo bien?

-Todo bien. Adiós Harry.

-Nos vemos. Te quiero, Alex.-Me estremecí con la última frase.

No miento al decir que me pone de los nervios, pero a veces me hace sentir especial y eso pocas personas lo consiguen.

En ese instante recordé que había dejado solas a mis amigas. Me apuesto lo que sea a que estarán averiguando como ha acabado la conversación telefónica.

Regresé a mi habitación y volví a encender el ordenador.

-¿Cómo ha ido?-Preguntó Michelle.

-Estupendamente.-Suspiré.

-Pero…

-Me ha dicho que me quiere.

-Ohh…-Dramatizaron las cuatro. Yo puse los ojos en blanco.

-Bueno, me despido…

-¡Un momento! Zayn y yo habíamos  hablando de pasar un día juntos los diez.

-¡Sí, que bien va a estar!-Exclamó Sheila.

-Yo no sé si…

-No Alex, tú vienes que con las parejitas me margino.

-¿Sabes? Yo no tengo “parejita”…-Reclamó Sophie con sus comillas tan graciosa.

-Me lo pienso. ¿Qué día sería?

-Algún día que ellos estén libres. Y nosotras claro.

-Vale. Ahora sí que me despido, hasta luego.

-¡Adiós!-Respondieron y desconecté.

Bajé a la cocina y abría la nevera donde se supone que ha dejado mi madre la comida.

 

*Narra Michelle*

 

-¿Mamá la cena ya está lista?

-No cariño. Queda un ratito.

-Jo. ¿Es verdad que no oyes mis tripas rugir?

-Pues no. ¿Qué tal si te das un paseo con Luke?

-Es que hoy he andado bastante esta tarde…-Luke es un labrador retriever color canela, un pero para las personas, un miembro más para mi familia. Fue un capricho de mis hermanos, toda su clase tenía una mascota y como ellos con tan consentidos,  se lo regalaron. Aunque eso no significa que lo odio o no le trate bien. Me encanta el perrito, le he visto crecer y era mi único compañero de la casa cuando me deprimía; además, es igual de glotón que yo.

-Por eso mismo, hoy no le has sacado.

-¿Y no lo pueden hacer mis hermanos? Esos que os convencieron a ti y a papá de comprar un perro.-Protesté agotando la cajita de Oreos.

-Ya está acostumbrado a que le lleves tú. Hazlo por mí, y lo próxima te cojo dos paquetes de Oreos.

-Vale mami. Te quiero mucho.-Le di un beso en la mejilla.

Salí de casa, la caseta de Luke se encontraba justo afuera. Antes de que yo le pusiese la correa él se abalanzó encima de mí. Qué empalagoso. Después de mucho lamer y muchas risas fuimos a dar una vuelta por la calles de Londres.

Mucha gente que acababa de salir de trabajar regresaba a casa, haciendo ejercicio,  adolescentes comportándose como estúpidos por la acera o simplemente gente que pasaba el tiempo en alguna cafetería. También había que pasaba al perro.

De repente Luke comenzó a correr y,  ya que era más fuerte que yo, no se me ocurría cómo frenarle. Tiraba de él y él tiraba de mí, así unas calles más.

Todo el mundo me miraba, pero no eran lo suficientemente listos cómo para ayudarme. Finalmente choqué con un chico, fue lo normal, y entonces ya paró.

-Perdón, no sé qué cosa ha tomado el perro que ha salido disparado.-Me disculpé jadeando.

-Bah, da igual… ¡Anda! Hola Michelle.

-¿Quién eres?-Se quitó las gafas y ya lo vi más claro.

-Hola Niall. Lo siento otra vez.-Atraje el perro hacia mí pero este se negaba.

-Creo que tu perro ha tenido una especie de flechazo conmigo.

-Yo creo que quiere tus patatas.

-Oh.-Bajó el brazo y le entregó las patatas. Sin que se diese cuenta le robé una, pero sí que lo vio y me limité a sonreír.

-¡Mierda!

-¿Qué ocurre?

-Mira al parque de enfrente, en el banco más cercano a los columpios.

-¿Quiénes son?

-Unos compañeros de clase y Jake.-Esto parece que la gente me persigue.

-Tengo una idea. Tu solamente déjate hacer.-Tras unos minutos Niall se acercó a mí y me rodeó por la cintura. Luego empezó a darme besitos en mis pómulos que se enrojecían cada vez más.-Nos mira, se pone celoso.-Susurró a mi oído. Coloqué mis brazos alrededor de su cuello y volví a la realidad, me aparté algo bruco y Luke comenzó a ladrar sin razón alguna.-Ya, ya le hemos provocado bastante.

-Queda acompañarte.

-No.-Apareció un rayo seguido de un trueno.

-Va a llover y por suerte, he traído un paraguas.-Elevó las cejas. Resoplé, no tenía otra. Giré la vista y Jake nos observada, puede que no todo fuera tan malo.

Caminamos hasta mi casa, nadie dijo palabra en este tiempo.

-Esta es mi casa.-Nos paramos delante. Niall le hizo una caricias a Luke, genial, le ha cogido cariño.

-Adiós, Michelle.-Mi dio un besito en la mejilla, el último del día.

-Adiós.-Me metí en casa lo antes posible. Quería gritar.

-Gracias Luke.-Le dije antes de entrar.

Vas Hapeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeenin'? ¿Os ha gustado el capítulo? Espero que os haya gustado :) Intentaré subir este fin de semana, pero no lo sé con exactitud. Que yo ya he empezado en insti y no tengo mucho tiempo, seré malota y escribiré en clase si me aburro ;)
Bueno, muchaaaas graciaaaaas por leer y comentar, si hay algo mal, lo siento es que lo he hecho en mis tiempos libres y no sé si está decente.
Nos veeeeeemos. Un besazo<3

CAPÍTULO 26

*Narra Michelle*

 

-Tú lo sabes, ¿qué ha pasado?-Solo respondió con risas.-No me cabrees.-Esta vez paró y comenzó a llorar.-Oh, vamos peque, no era mi intención.

Me senté en la cama y él sobre mis rodillas. Charlie se restregó los ojos y me miró. Parece que ya estaba más feliz.

-A ver, empezamos de nuevo, qué has visto.

-Louis y Sopie.

-Y qué más, que ha ocurrido entre ellos.

El niño reflexionó unos segundos para luego juntar una palma de su mano con la otra. Me imagino que puse una cara muy rara con respecto a eso. Charlie realizó otra vez lo mismo, y nada.

-¿Aplaudieron?-Pregunté extrañada.

-No. Se juntaron.-Y repitió lo de las manos.

-Oinns. ¿Y se unieron en un dulce beso?

-No. Logo Sopie hiso.-Apoyo sus manos contra mi pecho.-Y Louis…

-¡¿Le toco las tetas?!-Pregunté incrédula.

-¿Quién ha tocado a las tetas a quién? ¿Y qué haces hablando de esos temas con mi hermano?-Sophie se lo llevó a otro cuarto y volvió.

Se dejó caer en a mi lado. Suspiraba y suspiraba a la vez que tiraba un peluche hacia arriba.

-¿Me lo vas a contar?-Me tumbé bocabajo-¿Y a las demás?

-Voy a enviarlas un mensaje.-Cogió su móvil y tecleo algunas cosas.

 

*Narra Harry*

 

Mal. Ha ido todo mal, al menos para mí, seguro que ese tal Will ya tiene una cita. Decidme, ¿en qué parte me he equivocado? Como nadie contesta voy a tomarlo como un nada.

Veo que esta chica de desiste a mis encantos, es rara.

Abren la puerta y aparece ella con una sonrisa, su sonrisa hace que me enamore aún más, pero desaparece en cuanto por el sitio en el que estábamos antes, que ahora mismo el único que permanecía ahí era yo.

-Si solamente has venido aquí para ligar, ya te puedes marchar, ahí está la salida.-La señaló.

-No puedo irme, ¿y Zayn? Oye, yo no estaba ligando contigo.

-¿Ah si? En ese caso, no me comías con la mirada ni me agarrabas la pierna para acariciármela. Son alucinaciones mías.

-Pues es posible.

-Escucha Harry, no me vaciles en estos momentos. Zayn es capaz de caminar solito hasta su casa.

-Espera, ¿me has dicho que te comía con la mirada?-Resopló.

-Sí, lo que ocurre es que no ha dado resultado. ¿Y sabes qué? Gracias a ti voy a quedar con Will. ¿Y por qué con él y contigo no? Porque  tú a mi no me gustas, no siento nada por ti. ¿Te entra en la cabeza? En este instante sé que no voy a quedar contigo, a lo mejor lo que escriben en las revistas es cierto.-Esto lo dijo prácticamente gritando.

Os voy a confesar: me dolió mucho, bastante. Yo no soy mujeriego, y enterarme que me gusta alguien del que no soy correspondido me destroza aún más.

 

-¿Y tú a él le quieres?

-¿Eh?

-A Will, que si le quieres.

-Sí. Es majo y además es muy guapo. Tampoco busca a la primera que ve al girar la esquina.-Mi cuerpo entero se tensó.

-Está bien. Adiós.-Me levanté muy enfadado.

Me apetecía encerrarme en una habitación y empezar a tirar, golpear o machacar todo lo que hubiese en ella.

-Zayn, vámonos por favor.-Comenté al llegar a la mesa de Emily y mi amigo.

-Estoy ocupa…

-¡Joder, vámonos ya!

-¿Harry estás bien?-Preguntó Emily.

-Claro, perfectamente, aunque tú estarás mejor con tu novio. Qué suerte, no la desperdicies.-Y me dirigí a la puerta.

Al rato Zayn me encontró en el banco de un parque.

Nos fuimos al coche y en el trayecto ninguno mencionó ninguna palabra. Él sabía muy bien que no quería hablar con nadie ni dar explicaciones.

Me dejó enfrente de mi apartamento donde pasaría la mayor parte de día. Nunca pensé que una chica casi me partiría mi corazoncito por la mitad.

 

*Narra Alexia*

 

Harry. Esa era la persona que me ponía de los nerviosos, encima mi jefe me ha llamado la atención por hablar en vez de trabajar. A parte del espectáculo con Emily antes.

Menos mal que nuestro turno había acabado, éramos más que libres.

-Alex, tengo un whatsapp del grupo.-Revisé mi móvil, y efectivamente, de Sophie, de mi madre y de Will.

-Dice que nos conectemos al Skype cuando estemos libres.

-Y que avisemos.-Finalizó mi amiga.

-¿Te quedas en mi casa? Mi madre me ha puesto que está de noche, así que estoy solita.

-Tengo que estudiar, no creo que me dejen.

Cree una mueca de fastidio, pero qué se le iba a hacer.

Nos despedimos con un beso en la mejilla y estuvimos andando cada una a su casa.

Al desencajar la llave de la cerradura fui directamente al salón y caí en el sofá, mi nariz sufrió un poco.

Recordé el mensaje de Sophie.

Mierda, con lo a gusto que se estaba.

Subí a mi habitación, me di una ducha ultra rápida y me puse el pijama. Encendí el ordenador y abrí sesión del Skype. Faltábamos Emily y yo, que tardó una milésima en aparecer.

Acepté la petición para iniciar la videoconferencia.

-¡Hola!-Saludamos los cinco a la vez.

-¿Cómo estáis?-Sheila.

-Muy bien.-Respondieron Michelle y Emily.

-Podría ir mejor.-Esa fue Sophie.

 

¿Era mi turno no? Qué les iba a decir…

-Michelle, ¿has cenado?

-No, ¿por?

-Déjala, es una adicta de los Oreos.-Todas reímos ante el comentario de Sheila.

Estuvimos bromeando de cosas sin importancia, era para alegrar la conversación, pronto venía lo que temía.

-Bueno, ¿qué os contáis?-Michelle, que oportuna eres. Hubo un silencio hasta que Sheila lo rompió.

-Liam y yo estamos saliendo. He hablado con mis padres, les parece bien, no muy convencidos y que tienen que conocerle, lo normal.-Nos pusimos a gritar y saltar. La felicitamos por su nuevo noviazgo.

-Zayn y yo también. Me lo pidió ayer y ya se hace oficial.-Comentó Emily. Otra vez a gritar, saltar y felicitar, aunque esto se esperaba.

Las dos nos relataron  sus citas, madre mía, exijo una de esas.

-Ahora le toca a Sophie. ¿A qué sí?-Esta miro amenazante a Michelle pero asintió al ver que yo no quería.

Ella nos contó lo sucedido esta tarde.

-Vamos a ver, olvídate de Mike, él no es nadie para ti.-Expliqué ya con señas.

-Céntrate en Louis, la próxima le plantas un beso.

-Sí, y le metes la lengua hasta el fondo.

-¡Emily!-Exclamó y reímos de nuevo.

-Pues ya os digo que a mí no me ha ocurrido nada interesante.-Por más que la sacásemos algo, decía la verdad.

-Alexia, desembucha.-Gracias Sheila.

Les conté mi súper día en el Starbucks y finalmente mis amigas terminaron boquiabiertas.

-¿Creéis que he hecho mal?-Formulé por sus caras algo arrepentida.

-Totalmente. Solo hay que presenciar la forma en la que se puso al irse.

-¿Quién es Will?

-Un compañero del instituto. Ha ido porque supuestamente me dejé un libro en clase.

-Pero es muy gracioso y amable.-Repliqué yo.

-Ya, y no te gusta. Lo dices para hacer daño a Harry. Sabemos que te mueres por quedar con él.-Contraatacó Sophie.

-Yo no…-Era cierto, Will no me gustaba, me caía bien y punto. No pretendía que Harry… debía de disculparme.

-Hay que pedirle perdón.

-¡Llámale! –Exclamó Michelle.

-¡Sí!-Exclamaron las demás.

Después de muchos “más tarde”, “en un rato” o un “no” pulsé a llamar al número de Harry. Me temblaban las manos. Todavía no sé exactamente cómo me va a perdonar.

 

 

 

Holitaaaaaaaaaaaaaaaa:3 ¿Qué tal? Yo muy cansada porque son las nueve y media de la mañana jaja y he pensado en subir un nuevo cap. Espero que os haya gustado, a mi es que este no me ha convencido esta vez.

Dos cosas:

-Con el instituto y todo eso tardaré mas en subir, nos os podría decir cada cuantos días porque puedo hacerlo cada dos días o cada dos semanas.

-Me he hecho twitter, por fin jaja tenía otro que no utilizaba. Si quereis saber algo sobre la fic, decidme que os está pareciendo o simplemente porque soy maja, soy @AnaaDreamer y cuando yo ya sepa como va eso ;) os iré avisando cuando publique un capítulo, solo si queréis.

Un besito a todos<3 Muchas gracias por leer!