lunes, 29 de julio de 2013

CAPÍTULO 19


*Narra Sheila*

 

Llegué puntual a casa de Sophie, aunque Alexia se me adelantó. Entre las tres estuvimos preparando la comida y eligiendo pelis entretenidas para esta noche.

Al rato alguien tocó el timbre y Alex fue a abrir.

Mientras, Sophie traía un bol gigante lleno de palomitas a la vez que miraba preocupada el reloj del salón.

-Se van a retrasar.-Dijo en voz baja para ella, pero yo conseguí entenderla.

-¿Quién va a retrasarse?-Pregunté interesada.

-Hey chicas, mirad a quien me he encontrado en la puerta.-Intervino Alex.

-¡Emily! ¿Qué tal estás?-Sophie corrió a abrazarla dejándome sola intentando saber lo que tramaba mi amiga.

-¡Hola Sheila!-Se acercó a mí para darme un achuchón.-Pero bueno, ¿cuántas cosas vamos a comer nosotras no?

-Sí, ya sabes cómo es Michelle.-Contestó Sophie sin dar importancia. Estaba claro que tanta comida no era normal.

Emily pasó su brazo por mi hombro y me llevó a una parte más “segura” para hablar.

-¿Has leído las noticias?-¿Ella también lo sabía? Esto va de mal a peor. Asentí con la cabeza.

De repente, volvieron a llamar al timbre, esta vez fue Sophie la que abrió.

 

*Narra Niall*

 

-Lou, ¿dónde nos estás llevando?-Preguntó Harry muy impacientado.

-No os lo puedo decir.

-¿Por qué no? Me estoy cansando de estar metido en un coche.

-Es una sorpresa que os he preparado, aunque puede que a algunos no le guste…

-Me das mucho miedo.-Harry se estremeció en el asiento.

-Dejadlo ya, cuando estemos lo sabréis.-Intervine. No me apetecía hablar, y quería que se callasen ya de una vez. Estaba distraído mirando el paisaje a través del cristal de la ventanilla y Liam, Liam no hablaba desde hace casi una semana.

-Zayn, gira a la derecha y ya hemos llegamos.-Obedeció. ¿Y por qué no conducía Louis y nos llevaba directamente hasta no sé dónde? Ah sí, se chocó con otro coche y tienen que arreglar las zonas en la que hay abolladuras.

-No hay para dejar el coche, bajaos vosotros que ya encontraré.-Frenó y los cuatro salimos viendo como Zayn se alejaba.

Andamos un par de casas y Louis se adentró en el jardín de una, a lo que después llamó al timbre.

-¿Qué hacemos aquí?

-Calla y lo verás, Harry.

-Hoy nuestro irlandés no está de muy buen humor eh.-Bromeó Louis.

Una chica pelirroja de pelo liso y con unos ojos celestes muy bonitos nos abrió la puerta al segundo.

-¡Hola Louis!-Exclamó.

-Si aquí está la chica más borde del mundo.-La chica puso una mirada de pocos amigos.-Es broma. Chicos, os presento a Sophie ellos son…

-Tranquilo, no hace falta que me digas sus nombres.

-Sophie, ¿ya ha venido Michelle?-Apareció otra chica de pelo castaño oscuro muy rizado y ojos verdes de la misma edad que su amiga. ¿Esa no era la chica que conocimos en el Starbucks cuando quedamos con Sheila?

-¡Alex! ¿Cómo tu por aquí?

-¿Harry? Y… ¿One Direction?-Se puso a gritar y dar saltitos aunque ya nos hubiera visto en ocasiones. Sophie, creo que era, la tranquilizó.

-Bueno, yo soy Alexia, me podéis llamar Alex, pero creo que ya me conocéis. Perdonadme, es que estoy muy ilusionada de que estéis aquí.-Otra vez a saltar.

-Un momento.-Intervino Liam.-Si estás tú.-Señalo a la pelirroja.-Y tú también.-Ahora a Alexia.-Entonces estará…

-¿Chicas y este jaleo que estáis montando?-Esa voz no era otra que la de Sheila. Al vernos se quedó  completamente asombrada y sus ojos como platos. Giró su mirada a Liam y estuvieron así durante un tiempo.

-Siento interrumpir. Como ya sabéis, esta es Sheila. Y falta una a ver dónde se ha metido.

-Vaya vaya vaya, a quienes tenemos aquí.-En este caso, otra chica con el pelo oscuro y ondulado muy morenita y de ojos color caramelo nos dio la bienvenida.

-Hola, soy Emily, para los que no me conozcáis.-Masticó las palomitas que acababa de tragarse.- ¿Y Zayn?-Sacó la cabeza para moverla de un lado a otro en busca de nuestro  amigo.

-Quieta, está aparcando, no te desesperes.-Respondió Louis parándola poniendo su mano sobre su cabeza despeinándola un poco.

-Cuidado con mi pelo.-Se quejó intentando colocárselo.

-Venga ya que estamos casi todos, pasemos.-Sophie nos dejó pasar. Esto es muy extraño, ¿por qué estamos en esta casa?

Nos sentamos todos en los sofás y Alexia encendió la tele. Al poco rato Zayn apareció, Emily corrió hacia él y se dieron un gran abrazo. ¿Y estos dos?

Dirigí la vista a Liam que no paraba de mirar a Sheila, esta observaba atentamente los anuncios. Le di un codazo.

-Habla con ella, es tu oportunidad. No ves que lo han hecho para esto.-Suspiró.

-Tienes razón.

Se levantó de su asiento y le dijo unas cuantas cosas a Sheila, lo que ella asintió apenada. Los dos se fueron a una habitación a parte. Sophie y Louis intercambiaron una mirada cómplice.

Me sentía solo, cada uno tenía a alguien con quien hablar, hasta que Alexia sacó un tema con el que conversar los siete.

Puede que estuviéramos dialogando de cosas sin importancia, pero fue la mejor media hora que tenía en mucho tiempo. Esas chicas me habían caído muy bien, eran súper chistosas.

Sin darme cuenta ya me había terminado las palomitas yo solito.

-Sophie, ¿podrías hacer más palomitas?

-Ve a la cocina, está justo al otro lado. Ahí hay un montón de bolsas con palomitas, sírvete tú mismo.

Salí del salón y fui directo a donde me mandó. Llené hasta arriba el bol, una vez que comía, no podía parar.

Como entre la cocina y el salón se encontraba la entrada, fui el único que oyó como el timbre volvió a sonar.

Me precipité a la puerta y al abrir vi a una chica de pelo rubio recogido con una coleta llorando a más no poder. Posé mi mano en su hombro. Ella elevó su cara y pude ver quién era. Yo a esa chica ya la he visto antes…

-¿Qué haces tú aquí?-Me preguntó limpiándose las lágrimas.

-Yo emm… ¿Michelle?

-Sí…-Cogió un puñado de mis palomitas.- ¡Sophie!

 

*Narra Michelle*

 

Está furiosa. Entré corriendo dejando a ese tal Niall, que por cierto no sé que hace en casa de Sophie.

-¡Michelle!-Su rostro cambió al verme.- ¿Pero qué te pasa?

-¡Suéltame! ¡¿Tú lo sabías, verdad?!-No entendía el por qué de que otros tres chicos también estaban en el salón.

-Que tengo que saber yo… no sé de qué me hablas…

-¡No me mientas! Tú sabías que tenía novia y no se te ocurrió decírmelo.

-¿Novia? ¿Qué novia?

-Tranquilízate.-Intervino Emily.

-¡¿Cómo quieres qué me relaje cuando te enteras que el chico del que llevas enamorada mucho tiempo no siente lo mismo por mí y tiene novia?! Dime ahora cómo lo hago.-Todos se callaron. Me estaba pasando demasiado.

Subí las escaleras y me encerré en una habitación. No me encontraba para nada, solo llorar y llorar, parece que es lo único que sabía hacer.

 

*Narra Sheila*

 

Mi cuerpo temblaba y mis manos estaban sudorosas. ¿Qué me iba a decir ahora? Había muchas posibilidades.

Entramos en el cuarto de los padres de Sophie, ya que tenía una cama de matrimonio y me puse cómoda.

-¿Qué tal estás?-Preguntó curioseando cosas de la habitación.

-Estoy.-No podía evitar tocarme las manos y mirar a todas partes menos a él. Se sentó al lado de mí y me cogió la mano acariciándola.
 
-Quiero disculparme. Lo siento. No tendría que haberte invitado a mi casa y mucho menos, intentar besarte. Pero… te quiero.-Le observé a los ojos sorprendida.-Desde el momento en el que te vi en ese hospital, pensé que eras la chica más guapa y te juró que nadie me ha hecho sentir esas cosas en mi vida. Por eso intenté contactar contigo y bueno, intentar que tú también sintieses algo como yo. Y de esos dos días que conseguí quedar contigo, creo que me enamoré de ti, no pude contenerme las ganas de darte un beso de una vez. Aunque en ese instante, vi que tú no tenías esas ganas, ya que me trataste como una de mala educación, eso da igual. Y bueno, no me gustaría que por eso tengamos que estar distantes. Me hubiera encantado tratarte como si fueras la persona más importante del mundo, hacerte cosquillas cuando me enfado por una tontería o que al despertarte el primero que veas sea yo; pero me temo que eso no será posible. Olvídate de todo lo que ha pasado. Así que te voy a hacer una pregunta, ¿amigos?-Como no esa sonrisa que adoraba.

Dios, eran las palabras más bonitas que alguien me ha podido decir. No sabía que contestar. ¡Qué se ha enamorado de mí! Y no mentía, por supuesto que no.

-Claro.-Me abalancé sobre él al darle un abrazo, me hacía falta asimilar lo ocurrido.-La verdad, no va a ser fácil olvidarse.

-¿Por?

-Está en todas las revistas, puede que ahora nos estén sacando una foto.

-¿En serio?-Asentí.

El resto de la tarde lo pasamos conversando animadamente en aquella habitación, como amigos.

 

*Narra Niall*

 

Nosotros seguíamos hablando de lo que sucedió hace unas horas. Si al conocerla se comportó como una borde, esta escena iba mejorándola por momentos.

-Os aseguro que Michelle nunca es así…

-¿Sophie es cierto que no sabías nada?-Preguntó Alexia.

-¡No! Bueno… yo le llamé está mañana y el me dijo que arreglaría las cosas con ella, pienso que será por esa razón por la que está de esa manera.

-Alguien tiene que ir a hablar…

-Yo conozco a uno que no estaría mal.-Intervino Louis mirándome, pícaro.

-Jajaja nada más entrar en el cuarto me tirará una estantería.

-Venga Nialler, probar no te matará.-Esta vez fue Zayn.

No tuve más remedio que volver a levantarme del sofá y subir las escaleras.

-Oye si me sale un chichón.-Me señalé la cara.-La culpa os cae a vosotros.

Subí a la planta de arriba y al también estar los dos tortolitos encerrados en una habitación no sabía cuál de todas era, hasta que escuché unos llantos. Di unos toques a la puerta.

-¿Se puede?

-No.-Giré el pomo y para mi suerte, la puerta se abrió dejándome ver.-Creo que no cerraste del todo bien.-Ahora yo fui el que cerré correctamente, con pestillo.

Estaba sentada en el suelo apoyada por la cama. Me senté junto a ella.

-¿A qué has venido?-Preguntó intentando sonar lo mejor posible.

-A saber cómo te encontrabas. Y también a pedir perdón por cómo me comporté el viernes.-Repentinamente, me abrazó fuertemente y rompió a llorar otra vez, estaba muy dolida.

Permanecimos así un buen rato, pero yo me separé y comencé a limpiar algunas lágrimas que caían por su cara.

-Ya estoy perfectamente.-Sonrió y se puso de rodillas.-Además, no hace falta que te disculpes. Debería haberte hecho caso, nunca le gustaré a Jake.-Aclaró con una cara de fastidio, pero se la veía mucho más feliz.

-Puede que sí, para cuando eso pase tú ya estarás con otro chico y él se arrepentirá de lo que hizo.

-Gracias Niall.-Me levanté y yo la ayudé a hacerlo.

-Anda, pero si se acuerda de mi nombre, eso no me lo esperaba.-Me golpeó en el brazo. Hice una mueca de dolor y ella rió.

Salimos de la habitación. Se oyeron unas carcajadas al lado, a saber qué hacían. Bajé las escaleras y ella detrás de mí.


Observé como los demás seguían en sus mismas posiciones y riendo mucho más que antes.

-¡Habéis vuelto!-Exclamó Harry.

Ocupamos los sitios que quedaban libres.

-Chicas, perdón por comportarme de esa forma, sobre todo con invitados.-Se dirigió a mis tres amigos.-Siento que tengáis que haber presenciado mi mal humor, yo no soy así.

-Tranquila, estás perdonada.-Dijo Zayn.

-Bueno chicos, tenemos que irnos.-Ese era Louis. Los tres protestamos, pero no dio resultado.

Llamaron a Liam. Nos intercambiamos los números que no teníamos cada uno y nos despedimos.

 

*Narra Liam*

 

Después de que Louis me avisase de que nos teníamos que marchar, Sheila y yo bajamos.

-Adiós Liam. Puede que solo hayamos hablado y no hemos estado los diez juntos, pero me lo he pasado muy bien.

-Yo también. Nos vemos, Sheila.

Estuvimos en silencio. Podía oír su respiración, estaba nerviosa, pero en menos de un segundo su rostro cambió. Decidida posó sus manos en mi hombro y me robó un corto beso.

-¡Liam!-Gritaron desde la puerta.

-Hasta luego.-Aceleré el pasó y me fui con los chicos, no sin antes despedirme de las chicas.

Al salir no puede evitar mirar hacia atrás, y como si le hubiera leído la mente, ella también lo hizo. Sonreímos entre nosotros hasta que cerraron. ¿Qué sucedería ahora?
 
 
Holaaaaaaaaaaaaaaaaaas queridas lectoras:3
He vuelto con un nuevo capítulo, me ha llevado entre ayer y hoy
escribirlo y es larguito así no os podréis quejar. Hope you like it :)
Tengo que decir que mañana me vuelvo a ir a la playita y no podré
subir hasta más de una semana. Intentaré escribir algo :s
Y nada más, que gracias por leer y disfrutar del cap.
Un besituu!
PD: Siento el cambio de letra, mi ordenador es un cabezón y no
quiere poner la misma jaja.
PPD: Comentad majosas! Que hacéis muy feliz, thank you. ;D
 
 

sábado, 27 de julio de 2013

CAPÍTULO 18


*Narra Sophie*

 

-Nos vamos a casa de los abuelos. Te dejamos sola. Ni se te ocurra poner la casa patas arriba tú y tus amigas.-Me recordó mi madre por séptima vez contada.

-Mamá, relájate, te he contado lo que hacemos siempre estos días y no es para alarmarse.-Puse mis manos sobre sus hombros para tranquilizarla.

-Cariño, ya es mayor, sabrá estar aquí con las chicas.

-Gracias, Adam.-Caí rendida en el sofá, era muy difícil convencer a mi madre.

-Pórtate bien. Cualquier cosa, me llamas.-Me despedí de mi familia y se fueron directos al coche.

Al fin tenía la casa para mi solita. La semana se había pasado volando, ya era viernes. Y por suerte hoy era fiesta y teníamos puente hasta el martes. Había que aprovecharlo, aunque también vendría bien estudiar un poco, necesito ponerme las pilas para pasar este último curso.

Decidí enviar un mensaje a Louis diciéndole que todo estaba listo. Espero que salga esto no salga mal, si se enfadan y les da por tirar jarrones, mi madre me castuga de por vida.

Pero antes de preparar tenía que aclarar un asunto que me inquietaba.

 

*Narra Sheila*

 

Eran un viernes muy bonito para estar tirada en la cama viendo la tele. La verdad, estaba demasiado triste como para hacer algo. Lo he pensado esta semana: tendría que haberle besado. Ahora tendré que quedarme con la duda era obvio que no me quería ver, no me ha llamado, ni un mensaje. Por otra parte yo puedo hacerlo, pero mi cabezonería me superaba.

-Sheila, ven a mi cuarto.-Gritó mi hermano. Mucha pereza.

-¡Sheila! Es importante.-Resoplé. Me levanté y me dirigí a la habitación de al lado.

Mi hermano abrió la puerta rápidamente, me cogió del brazo y me hizo entrar. Volvió a cerrar de un portazo.

-¿Qué ocurre? Me has hecho daño…-Toqué suavemente la parte en la que me había agarrado.

Me sentó y señaló a su ordenador. Comencé a leer. “Liam Payne, de One Direction, tiene nueva conquista”.

-¿Por qué no me dijiste que ese tío era famoso?-Le mandé callar.

Al terminar me tapé la boca con las dos manos una puesta encima de la otra. Se veía claramente que la chica de las fotos era yo.

Giré la vista hacia mi hermano con una sonrisa inocente, pero sus ojos  transmitían mucho odio lo que causó que desapareciera.

-¿Vas a contestar a mi pregunta?-Se cruzó de brazos.

-Sabrías que era famoso si aunque fuera por una vez en tu vida visitaras mi habitación.-Toda estaba decorada con posters de mis niños.

-No pongas excusas. ¿Mamá y papá que van a decir al respecto?

-Mamá y papá no tienen que enterarse. Se lo diré cuando sea necesario.

-Están todo el día con el ordenador trabajando.

Me levanté y pegué y gruñido. Me tumbé en la cama de mi hermano boca abajo.

- Si quiero estar con él tengo derecho a salir con él, no pensé que íbamos a llegar a eso. A veces eres muy protector conmigo Gracias igualmente.-Se acomodó junto a mí.

-Después de todo no soy tan mal hermano.-Realizó unos movimientos extraños a lo que reí.

-Prométeme que no se lo contarás a mamá y papá, de momento.-Dije seria.

Él en cambio, echó un poco de saliva en la palma de la mano y me la ofreció. Reaccioné con una cara de asco.

-¿Tengo que escupir yo también?-Se encogió de hombros.

-Lo siento. Ni soñando, pero te creo.-Intenté salir de la cama entre tanta sábana. Le di un pequeño beso a mi hermano y regresé a mi cuarto.

Si antes me resultaba complicado olvidarme del tema solo hay que figurarse la cantidad de personas que han leído la página. No tendría que haberme asomado al balcón.

 

*Narra Michelle*

 

De los tantos y tantos cajones en la cocina no conseguía encontrar lo que quería. Abrí un cajón, y nada de nada. ¿Dónde lo he dejado? Este es el último cajón: ni rastro.

-¡Chicos! ¿En qué parte de la casa habéis puesto mi caja de Oreos?-Exclamé encaminándome al salón, en el que mis hermanitos disfrutaban comiendo mis galletas favoritas.

-Qué os he dicho de coger mis cosas.-Les arrebaté la cajita. Todavía había un paquete.

-Eh.-Protestaron al unísono.

-No lo puedo evitar.-Repliqué zampándome una Oreo de manera exagerada.

Escuché como sonaba el tono de llamada que cambié hace unos días. Genial, he abandonado a mi apreciado móvil. Rebusqué por el salón.

-Hija, está en la encimera.-Corrí por el pasillo.

-Gracias, papi.

En ese instante “Really don’t care” de Demi Lovato se paró. Habían colgado. Al ver quién era la persona, necesitaba hablar urgentemente con él. Un pitido anunció que tenía un nuevo whatsapp.

-Michelle, tengo que hablar de una cosa. Sophie me ha comentado que vais a estar en su casa. ¿Puedo  verte antes?-Las 4 y tenía que estar a las 5.

-¿Vas a tardar mucho?-Pregunté restando interés al asunto.

-Depende de que cómo te lo tomes.-Me empezaba a asustar.

-Dame media hora.-Respondí.

-Vale.-Puse un icono feliz.-Te regojo a las 4 y media. Puntual, por favor.

-Hasta ahora Jake.

-¡Adiós!

Guardé el móvil. Me duché y escogí la ropa: unos vaqueros claros con una camiseta roja sencilla recogida hasta media manga. Mi coleta alta que normalmente llevo solo que esta vez dejé algún mechón de delante caer por debajo de mis orejas y listo.

Hoy era un día tranquilo, no hace falta una chaqueta.

El timbre.

-¡Ya voy yo familia!-Me apresuré hasta la puerta.-Hola Jake.

-Hola. ¿Nos vamos?

-Claro.-Retrocedí unos pasos hacia dentro.-¡Me voy! Volveré mañana a la hora de comer.

Comenzamos a andar.

-¿Qué es eso que me vas a contar?

-Esto no es fácil para mí…-Paré en seco.-Mi abuela no está enferma, es más, está estupendamente.-Ahora me esperaba lo peor.

-¿Entonces por qué te fuiste?-Estuvo pensativo unos segundos.

-Tengo novia.-Sentí una punzada en el corazón.-No la conoces, es muy simpática, amable, graciosa y una chica con la que vale la pena pasar el rato. Aunque tú no querrás que te la presente… verás… sé que te gusto.-Agaché mi cabeza.-No me lo ha dicho nadie. El día que quedamos fue mi novia la que llamó, necesitaba verme, hacía ya una semana que no salíamos juntos y bueno, no quería que te deprimieras y me lo inventé.-Las ganas que tenía ahora de darle una hostia bien fuerte.-Michelle, eres una chica maja y guapa, pero no me gustas tanto como para tener una relación. No era mi intención hacerte ilusiones, por desgracia ya es tarde.

¿Y qué le cuento yo? Una sensación de tristeza y rabia recorría todo mi cuerpo. Esto de ocultar secretos no es mi especialidad.

A lo que voy: tiene novia. Me destrozaba por dentro. Un par de gotas pequeñas comenzaron a deslizarse por mi cara y descender hasta la acera de la calle.

-¿Eso es todo?-Asintió con la cabeza cabizbajo.-Adiós Jake.-Me despedí en un susurro prácticamente inaudible.

Me alejé de él disparada a casa de Sophie. En este momento desahogarse era lo único que quería hacer, y que mejor forma que en compañía de tus amigas. Es duro saber que un chico no te corresponde.

No tardé mucho en llegar. Aunque intuía yo que esta noche iba a ser la peor de todas al ver quien se hallaba detrás de la puerta.
 
 
Helloooooooooooooooooooooooooou :)
Ya he vuelto con un nuevo capítulo! Aunque yo pienso que
estos caps están siendo un poco rollo y creo que este es mas
cortito, espero que os guste y no os olvidéis de comentar ;)
Os agradezco que leáis mi fic., si veis que está gustando no
dudéis en enseñárselo a más gente.
Kisses muy muy grandes;3