CAPÍTULO 23

*Narra Emily*

 

¿Por qué siempre que pasaba uno de los mejores días de mi vida, al día siguiente, había instituto? Tendría que hablar con Zayn sobre este tema. Lo que me gustaría a mí era despertarme tranquilamente y recordar detenidamente cada momento de ayer, pero no, suelo despertarme con los gritos de mi madre en mi oído y preocupándome cuantos minutos me faltaban para no llegar tarde.

Me di una ducha rápida y me vestí con unos vaqueros y una sudadera básica. Me pregunté si todo esto que me ocurre es un sueño, me lo preguntaba a menudo, es demasiado… perfecto para ser real. Aunque si fuera un sueño, no me gustaría que nadie me pellizcara y así comprobarlo.

Bajé las escaleras y me encontré con mi madre en la cocina, normalmente ella estaba ahí antes que yo, necesitaba a una persona que me preparase el desayuno y que estuviera pendiente de que no durmiera más de la cuenta, mis hermanos todavía no iban al instituto.

Al terminar con el vaso de leche le di un besó a mi madre en la mejilla y un “cuídate” y “pórtate bien” de su parte.

A mitad de camino, comenzó a llover y tuve que acelerar el paso. Aún así, entré tarde al instituto, le debía mucho a ese conserje que me dejaba pasar todas las mañanas.

Subí al piso de arriba hacia mi clase. Desde la semana pasada profesores y alumnos me observaban por los pasillos, no quería ser el centro de atención, nunca lo era, me sentía incómoda e intimidada.

-Hola. ¿Te apetece sentarte con nosotras hoy?-Pude escuchar una voz al entrar en clase. Eran esas pijas que insultaron a Sheila. Se creían que al conocer a los chicos se los iba a presentar o hacernos amigas inseparables.

-Para nada.-Respondí al pasar por sus sitios.

-Os lo dije chicas, no vale la pena. Sigo sin entender porque nuestros ídolos están con una gilipollas como ella.-Esa fue la que llamó zorra a mi amiga. Me paré furiosa y me giré.-Repite eso.

-¿Qué pasa? ¿Ahora no tienes oídos? Es la verdad. Zayn se merece a otra chica mejor, como yo.-Las ganas que tenía de darle una hostia bien fuerte, se estaba burlando en mi cara. Levanté mi mano pero al instante alguien me tranquilizó.

 

 

-Déjalas.-Me giré hacia atrás y vi a un chico castaño de unos ojos azules claros. Es el mismo chico que me dio la solución de ese problema de matemáticas. Ahora que lo pienso, era bastante guapo.

Le seguí hasta mi pupitre habitual. Se sentó al lado de mí. Le miré extrañada, él tenía la costumbre de estar en primera fila.

-No hagas caso a Ashley y sus amigas, son unas creídas que se divierten fastidiando a la gente.-Ah, la chica se llamaba Ashley, nunca me había interesado en esas chicas entonces como que me daba igual. Aunque lleva razón, no iba a conseguir mucho viendo como ella se rompía una uñas y a mí poniéndome una nota que tendría que explicar a mis padres.

-Lo sé.-Contesté de mala manera cogiendo mis libros.

-Y yo, sobre todo porque soy un friki según ella con el que todos se meten.

-A mí no me importa eso.-Le dediqué una pequeña sonrisa, parecía ser muy majo.-¿Cómo te llamas?

-Will. Tú Emily, ¿no?-¿Cómo es que se ha enterado de mi nombre?

-Después de ese numerito que montaste, mejor dicho tu amigo o novio el morenito, el instituto entero lo sabe.-Volví a sonreír. Mi novio.

En ese instante, el profesor apareció por la puerta, es raro que haya entrado mucho antes que él.

…

Las horas transcurrieron lentamente hasta llegar a la última clase: matemáticas. Por más que me concentraba no comprendía esas cosas.

-Chss, no te duermas, solo quedan 10 minutos.-Susurro Will.

-Es que esto me aburre, además no entiendo nada.-Apoyé los codos en la mesa y estos sostenían mi cabeza.

-Yo puedo ayudarte, p-pero si t-tu quier-res, no digo que…-Ya sé lo que se había insinuado, reí por dentro.

-Estaría muy bien, lo que ocurre es que estoy ocupada y también trabajo en un Starbucks y…

-No pasa nada.-Bajó la mirada a sus apuntes algo apenado y yo le miraba igual.

De repente el timbre sonó. Recogí mis cosas y salí del aula entre la multitud. Me sentía mal al haberle rechazado, él como buena persona que es se había ofrecido a darme clases de matemáticas, que por cierto, me vendrían estupendamente. Yo, en cambio, lo único que se me ocurre es que estoy ocupada. Aunque tengo que admitir que sí que lo estaba. “Venga Em, no te tortures con eso”. Ya me las arreglaría yo para aprobar.

Fui a mi casa corriendo, lo normal cuando llueve y tienes frío. Entonces recordé la vez que me reencontré con Zayn. Ojalá volviera a pasar lo del otro día, si eso pasara, acabaría yendo a mi casa empapada. A lo mejor tiene muchos asuntos con el grupo. Pero me moría por verle otra vez, por besarle, por decirle cuanto le quiero… Estás tonta, Emily.

-¡Mamá ya he llegado!-Subí a mi cuarto, dejé las cosas y me puse ropa más cómoda.

Regresé abajo para comer con mi familia y cuando terminé comencé a hacer deberes. Genial, con tanta prisa me había olvidado de mi libro de biología.

 

*Narra Alexia*

 

Con mucho esfuerzo, conseguí llegar al Starbucks puntual, frecuentemente lo hacía. Guardé mis cosas y me puse a trabajar.

Al rato Emily apareció en la caja por arte de magia. Decidí darla un susto, ya que leía una revista al no haber nadie.

-VAS HAPPEEEEENIN’?!?!-Me apoyé y salté para sentarme encima del mostrador.

-Joder… me vas a romper los tímpanos.-Susurró tapándose las orejas.

-Bobadas. ¿Qué tal?-Aparté bruscamente la revista de su cara, ya sabía a donde quería ir yo.

-Bien, ¿y tú?

-Igual. Pero no hablemos de mí, vamos a centrarnos en ti.

 

 

-¿En mí? ¿Qué pasa conmigo?

-Venga Emily.-Me crucé de brazos.-Cuéntamelo, detalles incluidos.

-No.

-Por favor… hazlo por tu amiga que te adora y que te cubre cuando sales con tu novio…

-No es el sitio adecuado para contártelo, además las chicas luego…

-Se enfadan.-Dije imitando su voz y gesticulando raro.

-Exacto. Si me disculpas, tengo que ir al baño y no me acompañes.-Yo la seguí igualmente, aunque ella me cerró de un portazo y vi que era imposible. Di media vuelta pero me choqué con alguien. Y yo que creía que ese tema lo tenía superado.

-Perdóname, iba buscando a una persona. ¿Estás bien?-Me rocé la parte superior de la cabeza y la alcé para ver al chico. Que preciosos sus ojazos azules, había que admitir que ese chico estaba buenísimo.  Le miré detenidamente de arriba abajo y bueno, se diría a simple vista que ese cuerpo está bien trabajado aunque fuese abrigado.

Me saludó con la mano, debe de ser que me quedé embobada.

-¿Eh? Ah sí sí, estoy perfectamente.

-Me alegro. Una pregunta, ¿conoces a Emily? ¿Trabaja aquí?-¿Qué relación tenía este con mi amiga? No le basta con estar con el integrante del grupo más famoso del momento, también con un chico súperbueno.

-Lo primero, has formulado dos preguntas. Y segundo, sí la conozco, ¿por?

-¿Will? ¿Qué estás haciendo aquí?-Emily venía hacia nosotros tan extrañada como yo.

-Hola.-Sacó algo de su bolsa.-Saliste disparada de clase y te dejaste el libro de biología.-Já, bonita excusa.

-Muchas gracias, Will. ¿Y cómo te has enterado de…?

-Esta mañana me dijiste que no podía ayudarte porque trabajabas en un Starbucks, y bueno he investigado y este es al que yo iba de pequeño así que probé por entrar en este primero. Y da la casualidad de que he acertado.-Una casualidad, disculpen gente, solo ha sido una casualidad.

Este era el momento perfecto para marcharme y dejarles solos, pero dado que soy muy cotilla y que tendría que limpiar mesas, lo he pensado y me voy a quedar.

 

*Narra Harry*

 

Hoy me apetecía volver a ver a Alexia, qué mejor forma de hacerla una visita al Starbucks. Zayn también me acompañaba, estaba algo desesperado por Emily.

Nos metimos en su coche. Este trayecto se me hacía cada vez más agotador y largo. Vale, lo confieso, me gusta. No es como las demás. Aunque está claro que significa una mierda para ella, solo hay que recordar la vez que le pedí una cita y me contestó con que tenía muchas cosas que hacer, por no responder con un rotundo no.

Sin embargo, no me voy a dar por vendido, voy a hacer todo lo que esté en mis manos, tengo que lograr que Alexia caiga en el anzuelo. Pero no un anzuelo cualquiera, este anzuelo es  muy especial. La trataría como si fuera una princesita, una princesita con converse; ya que siempre lleva un par todos los días, y no se arrepentiría por nada en el mundo. Eso si cae en el anzuelo. Por el momento era imposible, más bien difícil, soy yo el que saca esa estúpida sonrisa al verla.

Y quién iba a decir que yo, Harry Styles, iba a querer a una chica con tanto cariño.

-Ey Hazza, ya hemos llegado.-Dijo Zayn saliendo de su coche.

Tuvimos que andar unas calles, en el centro no había muchos aparcamientos libres.

Ahí estaba, de espaldas con esos tirabuzones inconfundibles cayendo por debajo de los hombros junto Emily y un… un chico. Se le veía muy feliz hablando más que con Alex, con Emily. Seguro que no le va a gustar a mi amigo.

-Zayn, tienes que ver esto.-Señalé con el dedo la zona del local en la que se encontraban las chicas. Aceleró el paso hasta entrar en el Starbucks. No merecía la pena que yo también lo hiciera. No quería que montásemos un espectáculo, Zayn es capaz, así que fui a pedir un Frappuccino.

Espero que ese chico no pretenda acercarse a Alexia, yo choqué con ella primero.

 

 

 

Hola holitaaaaaaaaaaaaaaaaaa! ;D ¿Cómo estáis? Yo muy bien la verdad. He vuelto con un nuevo cap., que si lo pensáis, ya he escrito 23 capítulos y nunca me imaginé que algún día escribiría un blog jajaja.

Como siempre, espero que os guste. Muchisimas gracias por leer y comentar :)

Y bueno, habréis oído el notición, seguro que sí pero yo lo pongo: ZERRIE ESTÁN PROMETIDOS! *_________* adsndsjlñ. Cuando lo vi puuuuuuuuuuuuuuf, se nota que están super enamorados, aunque sean jóvenes estoy muy happy por ellos, hacen una pareja maravillosa.

También Liam tiene novia, se sabe desde hace mucho, da igual jajaja. Si dicen que no es a la que pidió 22 veces salir os voy a ser sincera: yo la respeto y puede que como dicen, Liam se ha olvidado muy pronto de Danielle al haber estado 2 años con ella, pero yo no tengo nada en contra de la chica. (Sophia)

Y esta noche los VMAs :D

Nada más lectoras. One kiss;3