*Narra Michelle*
Ese dichoso despertador del
móvil me ponía de los nervios. Mi madre aparece por la puerta y apaga la
alarma. Yo me doy la vuelta y me pongo boca abajo tapándome con la almohada.
-Venga hija, que hoy ya es
viernes.-Me ordena sacudiéndome una pierna.
-Voy.-Contesté secamente. Me
levanté de la cama y fui directa al baño. Al mirarme al espejo no tenía las
palabras exactas para describir mi cara. Me lavé la cara y me di un baño.
Después me vestí y baje las escaleras para desayunar con mi familia. Comí más
de lo necesario y además me llevé una bolsita de Oreos por si me venía el
apetito de camino a clase.
Subí un momentito a mi
habitación, tenía que lavarme los dientes y coger mi mochila, no sé qué haría
yo sin mis amados libros. Vi que en la pared había colgado un calendario para
organizarme. ¡Pero si hoy tenía la cita esperada con Jake! Bueno no era una
cita, llamémoslo una “quedada de amigos”. No me acordaba la verdad. Espero que
mi madre no se haya fijado en eso, aunque es el primo de una amiga, no creo que
le extrañe. En ese momento sentí como mis nervios iban aumentando. Respiré
hondo y salí de mi cuarto.
Mi padre ya me estaba
esperando en la entrada con mis hermanos. Él se ofrecía para llevarnos en coche
en vez de que fuéramos en autobús. Luego él iría a trabajar, claro está.
Mi hermana y mi hermano
estaban en mi antiguo colegio, todavía iban a primaria, solo les quedaba un año
para estar dándome la tabarra.
Llegamos a mi insti, justo
terminé la última galleta. Di un beso en la mejilla a mi padre. Este me dijo lo
de siempre, como “pórtate bien”, “no te distraigas en clase” y eso, yo le
respondí con un “tranquilo papá, lo tendré en cuenta”.
Entré al insti, saludé a
amigas y gente conocida y fui a la clase donde tendría mi primera clase del
viernes, Geografía.
-Buenos días,
Michelle.-Saludó Jake sentándose al lado de mí con una sonrisa.
-Hola Jake.-Respondí sacando
los apuntes del relieve de Asia.
-¿Preparada para hoy?-Tardé
un poco en recordar de qué me hablaba hasta que reaccioné.
-¡Oh sí! Por cierto, ¿Qué
vamos a hacer está tarde?
-He pensado que…
-Vaya si has pensado…-Bromeé
en voz baja mientras ordenaba las cosas de mi mesa.
-Sí. Y me siento
orgulloso.-Sacó pecho. Los dos reímos.-Venga, sigue con el plan.
-Podríamos ir a Nando’s y
luego a ver una peli. ¿Te parece?
-Claro.-Sonó el timbre
avisando que las clases ya empezaban.
…
Me encontraba en mi viaje de
vuelta a casa. Bajé del coche, almorzamos todos juntos y me fui a ver la tele
al salón y pensar qué puede pasar dentro de unas horas. Había quedado con mi
amigo en la salida que a las 5 vendría a por mí para ver una peli y después
iríamos a Nando’s, lo planeamos al revés de cómo lo dijo él, mi padre quería
que me quedase a comer.
Cogí el mando y ya eran las 4
y media, tenía que vestirme. Entré en la habitación y no sabía que ponerme.
Empecé a sacar más y más ropa. Al final me decanté por algo normal, no iba a ir
súper arreglada: unos vaqueros claros ajustados y una camiseta de tirantes
blanca con el estampado de búho negro. Me recogí el mi pelo rubio con una
coleta alta. Y aquí que no falten mis converse blancas, la verdad es que las
chicas y yo estábamos obsesionadas con esa marca. Me llevaría una chaqueta
vaqueras por si luego refrescaba, así era Londres.
Llamaron al timbre y bajé
corriendo, casi me caigo al bajar las escaleras.
-Hola señora Carter.
¿Michelle está preparada?
-Ya sabes que no hace falta
que me llames así, con Claire basta. Y sí en un momento viene.-Contestó mi
madre tan dulce como de costumbre.
-Estoy lista.-Me puse mi
chaqueta.-Un beso mami.
-Cuídamela Jake.
-Mamá…-Susurré, si seguía me
dejaba en ridículo. Jake soltó una carcajada.
-Vámonos anda.-Le agarré de
la mano y nos pusimos a caminar hacia el cine. Creo que me puse roja pero lo
dejé pasar.
-Pasadlo bien.-Escuché a mi madre
gritar. Después dio un portazo a la puerta de casa.
Al principio el trayecto fue
un poco silencioso, me daba vergüenza hablar con él. Más tarde fui eliminando
mis nervios, ya que habíamos sabido hablar de algo.
Nos dirigimos a la taquilla
del cine. Elegimos ver Gru mi villano
favorito 2, era una película con la que pasabas un buen rato, y más con mi
amigo, era muy chistoso. Pagamos y entramos a disfrutar de la peli.
…
-¡Qué bien ha estado!-Exclamé
saliendo por la puerta del cine.
-Verdad. Sobre todo con un
compi como yo.
-Chulito.-Le di un golpe en
el hombro.
-Pongámonos a andar.
-Sí. Tengo mucha hambre.-
Rebusqué en mi bolso hacer si tenía comida. Nada. Jake se rio de mí.
Continuamos caminado hasta
llegar a Nando’s. Era uno de mis restaurantes favoritos. Nos sentamos en una
mesa y empezamos a hojear la carta.
En el fondo del local se
encontraba un chico rubio que comía a más no poder. Llevaba unas gafas de sol,
¿para qué llevaba puestas unas gafas de sol por la noche en un restaurante que
estaba cubierto? La gente es más rara de lo que pensaba. Aparta la vista de
todo lo que tiene en la mesa y me mira. Me dedica una gran sonrisa cuando
termina de masticar. Yo le miré con una cara bastante rara. La pena es que a
partir de ahí no dejó de mirarme.
Vino un camarero a tomar lo
que queríamos y me sacó de mis pensamientos.
De repente el móvil de Jake
sonó. Se disculpó y fue a hablar con quien estuviera al otro lado del teléfono.
Se le veía preocupado. Yo me puse a pedir lo que quería para cenar, era mucho y
el camarero dijo que volvería en cuanto mi compañero terminase de hablar.
Me dirigí hacia el chico
rubio y este seguía observándome. Tengo que decir que me sentía un poco
acosada.
Jake se sentó con una cara no
muy feliz.
-Era mi madre. Quiere que
vaya a visitar a mi abuela, está un poco mal, no sé si demasiado. Lo siento
pero tengo que ir.-Me tapé la boca con la mano de asombro. Él me cogió la mano
restante.
-Claro que sí. Dale recuerdos
a tu abuela de mi parte. Aunque yo he pedido ya mi comida.
-¿Sería una pena
desperdiciarlo no? Quédate.-Dijo más alegre. Miré hacia fondo, ya sabéis a
quien.
-Emm… Vale.-Jake se levantó y
me dio dos besos.
-Gracias, Michelle.-Y se fue
deprisa.
Tardaron unos minutos en
traer todo lo que había pedido, que me lo zampé enseguida. Expliqué que mi
amigo se había ido por motivos familiares.
Cuando acabé con todo pedí
algo de postre, había hueco en mi estómago.
-Hola. ¿Qué haces tú sola?
¿Tú novio te ha dejado plantada?-Soltó el chico rubio de la mesa alejada.
-¿Te conozco?-Formulé muy
molesta. Se acomodó en el asiento y se
quitó las gafas.
-¿No sabes quién soy?-Noté
que él estaba extrañado.
-Pues no y no me interesa.
Ahora puedes irte a tu mesa.
-Ya he terminado-Contestó con
una amplia sonrisa.
-Entonces márchate a tu
casa.-Me estaba enfadando, y mucho, a ese chico se le sube el orgullo a la
cabeza.
-Señorita, aquí tiene el
postre.-Intervino el camarero depositando mi Choc-a-Lot Cake.
-Gracias.-Respondí
amablemente.
Comencé a saborear el plato
ignorando al chico de enfrente.
-¿Puedo probar?-Rodeé mi
postre con mis brazos y negué con la cabeza.-¿Cómo te llamas?-Dios, me estaba
hartando.-Yo me llamo Niall, por si te apetece saberlo. ¡Vaya! Que poco tardas
en comer.
-Soy así.-Me limpié la boca
con la servilleta.
Creo que no quería hacerme
nada, como mucho que volviéramos a salir o algo parecido.
-Yo me llamo Michelle.-Hice
un gesto con la mano, el camarero se aproximó.- ¿Podría traerme la
cuenta?-Asintió y recogió algún plato vacío.
-¿Por qué ese tío te ha
dejado sola?
-¿Por qué eres tan
entrometido en asuntos que no incumben?
-He preguntado primero.-Rio
victorioso. Suspiré-Asuntos personales. Tu turno.
-¿Cuál exactamente?
-Te has saltado mi pregunta.
-Soy muy cotilla. Te toca.
-Su abuela se encontraba mal,
necesita estar con ella antes que conmigo.
-¿Y cómo se que no me
engañas?-Preguntó haciéndose el interesante.
-¡No puedo mentirte con lo
que acabo de decir!
El camarero vino con la cuenta. Pagué
rápidamente y deje propina.
-¿Te acompaño a casa? Tengo
el coche aparcado.
-No. Déjame, quiero tomar el
aire.
-¿Estás mal por tu amigo? Se
te nota a distancia que te gusta, aunque él tiene que ser muy necio al no
enterarse.
Iba a responderle con unas
palabras no muy agradables, pero me derrumbé. Tenía razón, esta era como una
cita y ahora estaba hablando con un creido de mierda.
Una lágrima recorrió mi cara.
-Pues ya sabes, no estoy
disponible.-Caminé en dirección a mi casa dejando a ese tal Niall ahí parado.
Giré las llaves de casa
dentro de la cerradura y secándome las lágrimas entré en el salón.
-Hola. He vuelto.-Dejé el
bolso y me quité la chaqueta.
-¿Qué tal con tu novio?
-Andy solo es el primo de
Sophie. Estoy cansada me voy a dormir.-Me despedí y subí a mi cuarto. Me puse
el pijama, me lavé los dientes y me acosté.
Estuve mucho tiempo pensando,
no me esperaba lo de hoy. Mientras oía música en mi IPod conseguí cerrar los
ojos.
A ver, ya no se como decirtelo, espera ya se como. ES PERFECTO!!! Me encanta, la adoro y quiero el proximo YA.
ResponderEliminarUy, que chulito se pone el irlandesito con Michelle pero en el fondo es muy tierno. jajajajaj
Bueno, que no me enrollo mas. 8:D
Un beso preciosa.
PD: Felicidades a Perrie. Happy birthday to you, happy birthday to you. Te quiero robar al novio. Happy birthday to you. *baile de cinco segundos*
Bueno, mejor me callo jajajaj
Graciaaaaaaaas de verdad! :)
EliminarYa lo se son solo los nervios luego se ira relajando que nosotras sabemos como es nuestro Nialler jajaja.
Otro para ti guapísima:3
PD: JAJAJA ME HA ENCANTADO TU CANCIONCILLA!
PD2: No me sales en twitter ;( Búscame soy @AnaToInfinity aunque en realidad no es mío mío, una historia larga xD.